El gobierno español considera esta ley climática como una parte clave de la recuperación económica del país tras la pandemia de COVID-19. Se espera que la transición energética impulse el crecimiento económico en un 1.8% para 2030.
Enfoque integral para la acción climática
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) de España para 2021-2030 describe una estrategia integral para abordar los desafíos ambientales del país. El plan establece objetivos ambiciosos:
- Lograr la neutralidad de carbono para 2050
- Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en al menos un 20% en comparación con los niveles de 1990 para 2030
- Alcanzar una participación de energía renovable de al menos el 35% en el consumo final de energía para 2030
- Asegurar que al menos el 70% de la electricidad del país provenga de fuentes renovables para 2030
- Reducir el consumo de energía primaria en al menos un 35% para 2030
Impulsando la Transición Verde
Para lograr estos objetivos, España está realizando inversiones significativas en energía renovable, infraestructura de movilidad eléctrica, protección de ecosistemas y biodiversidad, y renovación del stock de viviendas. El gobierno también ha adoptado una Estrategia de Economía Circular, una Estrategia de Infraestructura Verde y un Ciclo de Planificación Hidrológica. El objetivo es apoyar aún más los objetivos ambientales del país.
Fortaleciendo la Adaptación y la Resiliencia
Además de sus esfuerzos de mitigación, España también ha aprobado un ambicioso Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático para el período 2021-2030. Este plan establece objetivos estratégicos y define un sistema de evaluación, así como indicadores para el impacto y la adaptación al cambio climático.
Enfoque Colaborativo para la Gobernanza Ambiental Global
España se compromete a contribuir a los esfuerzos internacionales para fortalecer los regímenes de protección ambiental global. El país ha demostrado su compromiso con los acuerdos multilaterales existentes, como el Acuerdo de París sobre el cambio climático, y se ha comprometido a aumentar su financiación relacionada con el clima a los países menos desarrollados en un 50% para 2025.
Conclusión
El plan climático integral de España representa un avance en los esfuerzos del país para abordar los apremiantes desafíos ambientales que enfrenta. Al establecer objetivos ambiciosos, invertir en sectores clave y colaborar con la comunidad internacional, España se posiciona como un líder en la lucha global contra el cambio climático y la degradación ambiental.
